Un nuevo nacimiento y la llegada del otoño a la Granja del Abuelo.
Hace unos días, nuestra burra Luna dio a luz a un precioso pollino (así se llama a las crías de burro).
El otoño, tiempo de calma y reflexión.
El otoño transforma la Granja del Abuelo: los prados se tiñen de tonos dorados, el aire huele a leña y las tardes se llenan de una luz suave que invita a la calma. Los animales se preparan para los meses fríos, disfrutando del último pasto verde y del calor del sol.
Es una estación que nos recuerda que la naturaleza tiene sus tiempos, que cada ciclo tiene un sentido, y que la vida rural es un equilibrio entre el trabajo, el cuidado y la contemplación.
Ven a conocer al nuevo habitante.
Invitamos a todas las personas que aman los animales y el campo a venir a conocer al nuevo miembro de la familia. Las visitas a la granja son una oportunidad para conectar con la naturaleza, aprender sobre la vida rural y apoyar los proyectos de conservación que llevamos a cabo desde la Fundación Agro&Cultura.
Cada visita, donación o actividad que realizas con nosotros ayuda a mantener vivos los valores del mundo rural y a cuidar de animales como nuestro pequeño burrito, símbolo de ternura, esfuerzo y tradición.
Forma parte de esta historia.
Si tú también crees en un mundo donde los animales y el campo tengan un futuro digno, forma parte de esta historia donando o apadrinando uno de nuestros animales.
Tu ayuda nos permite seguir ofreciendo cuidados, alimentación y un entorno seguro a quienes más lo necesitan.
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